Bienestar docente
En respuesta al empeoramiento de las crisis humanitarias, muchas de las cuales se han visto agravadas por el COVID-19, existe una necesidad creciente y urgente de priorizar y responder al bienestar humano a través de la educación. Si bien los enfoques para el bienestar a través de la educación a menudo se centran en las necesidades de los niños, las niñas y de los jóvenes, el bienestar de los docentes es de vital importancia. Los docentes en contextos afectados por una crisis trabajan en entornos educativos complejos, a menudo con un apoyo mínimo, en los que asumen multitud de roles y responsabilidades fuera de las tradicionales, para abordar las diversas necesidades de los estudiantes y de la comunidad. (Kirk y Winthrop, 2013; Mendenhall et al., 2018).
Los conflictos armados contribuyen a la destrucción de las infraestructuras y de los recursos necesarios para mantener las escuelas seguras y operativas. Los desplazamientos que resultan de estos conflictos a menudo producen una afluencia repentina de niños, niñas y jóvenes y una grave escasez de docentes. Las adversidades experimentadas tanto por los docentes como por los estudiantes en tales entornos, ocasionan tensiones, ansiedad y sentimientos de inseguridad severa en su vida cotidiana, lo que altera el progreso de aprendizaje y obstaculiza la promesa de la educación (Winthrop & Kirk, 2008).
Definición del bienestar docente
La Revisión general de la INEE (Falk et al., 2019) utiliza un marco socioecológico para definir el bienestar docente como algo específico del contexto a nivel individual, escolar, comunitario, nacional/regional e internacional. El bienestar abarca cómo se sienten los docentes y cómo funcionan en su puesto; e incluye sus afectos, sus actitudes y la evaluación de su trabajo (Schleicher, 2018; Collie et al., 2015). Por lo tanto, los recursos utilizados para apoyar el bienestar de los docentes deben contextualizarse, idealmente a través de un proceso participativo que sitúe a los docentes en el centro.
Herramientas y recursos para apoyar al bienestar docente
A través del trabajo de los grupos colaborativos sobre Docentes en contextos de crisis (TiCC, por sus siglas en inglés) y de Apoyo psicosocial y aprendizaje socioemocional (PSS-SEL, por sus siglas en inglés), la INEE ha contribuido de forma significativa al bienestar de los docentes en situaciones de emergencia. La INEE busca ahora desarrollar una Caja de herramientas para el Bienestar Docente que ayude a los actores de la EeE a satisfacer las necesidades específicas de los docentes en sus contextos locales.
Este primer resultado de la Caja de Herramientas para el Bienestar Docente comprende un mapeo de herramientas y recursos y un informe de análisis de los vacíos identificados, que se basa en el conjunto del trabajo desarrollado mediante la recopilación de recursos, herramientas y documentos de políticas o de abogacía existentes que abordan el bienestar de los docentes en situaciones de emergencia. La INEE ha mapeado estos materiales en su modelo socioecológico de bienestar de los docentes, para identificar los vacíos en la disponibilidad de materiales a nivel del individuo, de la escuela y de la comunidad, y en entornos normativos regionales, nacionales e internacionales.
La siguiente colección de recursos ha sido elaborada en el marco del «Proyecto de herramientas para el bienestar docentes, con el apoyo del Grupo de referencia sobre el bienestar docente, y seleccionada durante el Mapeo de recursos y herramientas para el bienestar docente dirigido por Sophia D’Angelo, Samaya Mansour y Lisa Walker