El Elemento Que Falta Para La Paz: Estudio Independiente Sobre Los Progresos Logrados en Relación con la Juventud, la Paz y la Seguridad

La resolución 2250, que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó en 2015, es la primera resolución dedicada plenamente a la importante y positiva función que las mujeres y varones jóvenes desempeñan en favor del mantenimiento y la promoción de la paz y la seguridad internacional. La resolución solicita al Secretario General que “lleve a cabo un estudio sobre los progresos logrados en relación con la contribución positiva de la juventud a los procesos de paz y la solución de conflictos, a fin de recomendar respuestas eficaces a nivel local, nacional, regional e internacional”.

En todo el mundo, hay jóvenes extraordinarios que buscan formas creativas de evitar la violencia y consolidar la paz, tanto en sociedades devastadas y afectadas por los conflictos como en aquellas que gozan de una paz relativa. El Estudio sobre los progresos logrados en relación con la juventud, la paz y la seguridad, preparado en respuesta a la resolución 2250 (2015) del Consejo de Seguridad, ofrece una oportunidad única para escucharlos y conocer las múltiples formas en que trabajan por la paz y la seguridad. Su trabajo podría reportar cuantiosos dividendos de paz y seguridad a las sociedades, los Gobiernos y los agentes internacionales.

Sin embargo, a muchas personas jóvenes les resulta frustrante la tendencia de los Gobiernos y de los agentes internacionales a tratarlas como si fueran un problema que hay que resolver, en lugar de considerarlas sus asociados para la paz. En el estudio sobre los progresos se insta a los Gobiernos y los agentes internacionales a que den un cambio radical y reconozcan a las personas jóvenes como “el elemento que falta para la paz”