Compartiendo experiencias en Colombia: retos y oportunidades de acceso a opciones de calidad educativa para los jóvenes en la localidad rural de Guasca, Cundinamarca
El pasado 15 de mayo de 2024, se llevó a cabo el Encuentro Temático de la Red Interagencial de Educación en Emergencias (INEE), titulado "Compartiendo experiencias en Colombia: Retos y oportunidades de acceso a opciones de calidad educativa para los jóvenes en la localidad rural de Guasca, Cundinamarca". Este evento se desarrolló en la Organización Pro Niñez Indefensa (OPNI), operador del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), que atiende en la modalidad de internado a cerca de 50 niñas entre los 11 y los 17 años en proceso de restablecimiento de derechos. El proceso de restablecimiento de derechos a niños y adolescentes en Colombia, definido por el Código de la Infancia y la Adolescencia (Ley 1098 de 2006), busca garantizar su protección y bienestar, asegurando el ejercicio pleno de sus derechos. Coordinado por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), incluye atención integral en salud, educación y apoyo psicológico. Además, promueve la reunificación familiar cuando es posible y asegura la intervención judicial para proteger sus derechos de manera efectiva, restaurando su dignidad y oportunidades de desarrollo
Un Contexto Desafiante
Las niñas vinculadas a OPNI, en muchos casos, han tenido una trayectoria educativa compleja, con antecedentes de desescolarización, deserción escolar, bajo rendimiento, extra-edad o relaciones conflictivas en el entorno escolar. Desde el momento de su vinculación, estas niñas y adolescentes son integradas al sistema educativo y matriculadas en un colegio del ámbito rural de Guasca, donde son atendidas bajo una estrategia pedagógica multigrado.
Metodología del Encuentro
El encuentro se llevó a cabo utilizando la metodología Roundtable Learning propuesta por Ellen Weber en Roundtable Learning: Building Understanding Through Enhanced MI Strategies, con el objetivo de crear un ambiente de discusión donde las niñas y adolescentes pudieran expresar activamente y desde su perspectiva; los desafíos y oportunidades para acceder a la oportunidades de calidad educativas en el contexto colombiano. Las intervenciones de las niñas, muchas de las cuales utilizaron dibujos y carteles, brindaron una visión profunda y conmovedora de su realidad.
Retos Identificados: Falta de Sentido en la Educación
Uno de los principales retos señalados por las niñas fue la falta de sentido que tiene la educación en los contextos sociales en los que habitan. Ellas expresaron que, en muchos casos, los ritmos y estrategias de enseñanza de la escuela tradicional no atienden sus necesidades específicas, lo que las deja rezagadas y refuerza su desinterés. Para las estudiantes, los contenidos curriculares y en general el proceso educativo no se percibe como necesario ni útil, lo que las lleva a preferir ausentarse de clases o no asistir, argumentando a sus familias que lo que se aprende en el colegio "no sirve para nada". Esta percepción se ve agravada por la sensación de que, bajo su perspectiva, resulta mucho más "rentable" y satisfactorio dedicar su tiempo a otras actividades. Esta desconexión con el sistema educativo a menudo incide directamente en su decisión de desertar de la escuela.
Adicionalmente, la falta de relevancia percibida en el currículo escolar hace que las niñas se sientan desmotivadas y alienadas del proceso educativo. La educación no logra conectar con sus intereses ni con las realidades de sus vidas cotidianas, lo que refuerza la idea de que el tiempo invertido en la escuela no tiene un retorno tangible o significativo. Muchas de ellas encuentran más valor en el “Rebusque” o el trabajo informal que les permite generar ingresos, o participar en actividades sociales que les proporcionan una satisfacción inmediata y tangible.
Abuso y Violencia Escolar
Otro desafío crítico identificado fue el abuso y la violencia escolar ejercida no solo por los estudiantes y profesores, sino en ocasiones por miembros de sus propios núcleos familiares. Muchas niñas mencionaron haber sido víctimas de "bullying" por parte de sus compañeros debido a sus características físicas, económicas o de origen. Además, denunciaron actitudes pasivas de los docentes frente a estos casos de abuso, e incluso la motivación de estos comportamientos cuando consideran que las estudiantes son "difíciles" o "problemáticas". Muchas de las niñas expresan que en sus vidas académicas han tenido experiencias negativas con docentes, muchos de los cuales son incapaces de reconocer las necesidades y características particulares de las estudiantes, implementando metodologías poco innovadoras que utilizan la calificación de manera punitiva, generando miedo, fastidio, apatía e inseguridad en los estudiantes. Estas prácticas no solo exacerban el clima de violencia y exclusión, sino que también minan la autoestima y el rendimiento académico de las niñas, perpetuando un ciclo de desmotivación y desinterés hacia la educación.
Las metodologías tradicionales aplicadas por estos docentes, basadas en la memorización y la repetición, suelen ignorar las formas diversas en que las niñas aprenden y se desarrollan. En lugar de fomentar un ambiente de apoyo y comprensión, muchos profesores optan por la crítica constante y la penalización por errores, lo cual inhibe la participación activa y el desarrollo de habilidades críticas y creativas en las estudiantes. La percepción de las calificaciones como un castigo más que como una herramienta de evaluación y mejora continua crea un entorno hostil y estresante. El miedo a las bajas calificaciones puede llevar a las niñas a evitar tomar riesgos académicos, participar en clase o pedir ayuda cuando la necesitan. Esto, combinado con la falta de apoyo emocional y académico, resulta en un bajo rendimiento y una desconexión cada vez mayor con el proceso educativo. En este contexto, es crucial la implementación de programas de capacitación docente que promuevan el uso de metodologías pedagógicas innovadoras y centradas en el estudiante, que reconozcan y valoren la diversidad de necesidades y estilos de aprendizaje. También es fundamental el establecimiento de políticas escolares que prevengan y aborden de manera efectiva el abuso escolar y la violencia, asegurando un ambiente seguro y propicio para el aprendizaje y el desarrollo personal de todas las niñas.
Oportunidades Visualizadas
A pesar de los numerosos retos, las niñas y adolescentes también visualizaron importantes oportunidades para mejorar el acceso a una educación de calidad. Subrayaron la necesidad de resignificar la educación vinculando a las familias y a los actores del sector educativo. Consideraron esencial sensibilizar a los docentes sobre las necesidades específicas de los estudiantes y sus contextos sociales y familiares, para que puedan adaptar sus enfoques pedagógicos. Las niñas propusieron fomentar la implementación de prácticas pedagógicas que estimulen y motiven a los estudiantes, proporcionando un aprendizaje significativo para las nuevas generaciones. Estas prácticas deben incluir contenidos prácticos y estrategias metodológicas que sean inclusivas, participativas y empáticas, adaptadas a las necesidades y capacidades individuales de los estudiantes. En particular, enfatizaron la importancia de desarrollar enfoques que atiendan a aquellos con dificultades o rezagos escolares, promoviendo un ambiente escolar seguro y libre de violencia, donde todos los niños puedan crecer y desarrollarse plenamente.
Conclusiones
El Encuentro Temático de la INEE en Guasca reveló la necesidad urgente de ajustar elementos en el sistema educativo colombiano para hacerlo más relevante, inclusivo, empático y seguro. Las intervenciones realizadas por niñas y adolescentes evidenciaron un escenario complejo, con diversas problemáticas que inciden directamente en la percepción que cada una de ellas ha desarrollado respecto a la relevancia de la escuela y la educación en sus vidas.
Para abordar estos desafíos, las estudiantes plantean que resulta crucial implementar acciones y estrategias educativas que den sentido a la educación y transformen la práctica pedagógica y la cotidianidad en el aula. Promoviendo metodologías innovadoras y centradas en el estudiante, estas acciones deben contribuir a eliminar todo tipo de violencia o abuso escolar y fomentar el acceso equitativo a una educación de calidad para todos los niños, niñas y adolescentes en Colombia, respondiendo a sus necesidades y preparándolos para enfrentar los desafíos del futuro.
Hernando José Macías Álvarez es docente y antropólogo con una Maestría en Estudios Sociales de la Ciencia, experiencia en la formulación de lineamientos para la Gestión Integral del Riesgo Escolar y formación en Educación en situaciones de emergencia. También es el Punto Focal de la INEE para Colombia.
Las opiniones expresadas en este blog son las del autor.