Nota de Campo: Crear resiliencia y mitigar el impacto del estrés tóxico en los niños y niñas de corta edad: Un modelo para transformar la crianza y el cuidado masculino en El Salvador
El Salvador es uno de los países más violentos del mundo, con una de las tasas de homicidios más altas entre niños, niñas y adolescentes (UNODC 2019). Las experiencias de los niños y niñas tienen un profundo impacto en su desarrollo y la exposición a la violencia en sus primeros años de vida puede conducir a trastornos sociales, conductuales, de aprendizaje y emocionales. Los cuidadores son fundamentales para proteger a los niños y las niñas de las experiencias perjudiciales y para promover su desarrollo positivo (Shonkoff and Phillips 2000). En esta nota de campo se analizan iniciativas de programas dirigidos por Save the Children, que ayudaron a mitigar el impacto de la violencia en niños y niñas de corta edad en tres departamentos (estados) de El Salvador. Desarrollo lo que conocemos como Modelo de Mitigación del Estrés Tóxico, formado por tres enfoques: desarrollar la resiliencia, promover la crianza positiva y proporcionar un cuidado masculino transformador en los primeros años de los niños y las niñas. Utilizando un proceso integrado que abarca múltiples sectores, incluyendo la educación, la protección de la niñez, la salud y la nutrición, desde septiembre de 2017 hasta septiembre de 2019 se aplican los tres enfoques en plataformas de prestación de servicios preescolares y comunitarios existentes y de nueva creación para niños y niñas de 1 a 6 años y sus familias. En esta nota de campo, exploro cómo las plataformas involucraron a los cuidadores primarios y secundarios de los niños y las niñas, tales como los trabajadores sanitarios de la comunidad, los facilitadores de grupos voluntarios y los docentes, y examino las implicaciones de estas plataformas para el campo, y para la política de primera infancia y desarrollo en general. En concreto, examino la forma en que estas plataformas garantizan que la programación y la investigación van más allá del desarrollo y el bienestar infantil, a fin de abordar adecuadamente el bienestar y otras necesidades de los cuidadores primarios y secundarios.